Nuestra experiencia en el tratamiento de urgencias de la hemorragia renal

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El sangrado renal es una urgencia poco común, la cual en ocasiones puede comprometer la vida del paciente, por lo que se requiere una cirugía urgente.

Eficacia de las embolizaciones

Desde que en 1970 se realizarán las primeras embolizaciones para tratar lesiones de las arterias renales, la utilización de esta técnica como tratamiento primario y como alternativa a la cirugía abierta ha ido en aumento, ya que es fundamentalmente un procedimiento menos invasivo que permite el control del sangrado renal.

Técnicas de embolización

Se realizó un análisis retrospectivo de pacientes consecutivos con hemorragia renal que se sometieron a terapia endovascular desde junio de 2012 hasta junio de 2017 en el Hospital Universitario Joan XXIII (Tarragona, España).

Se recogieron datos demográficos (edad, género y comorbilidad) y otras variables relacionadas (mecanismo de lesión, estabilidad hemodinámica y terapia anticoagulante).

También estudiamos los hallazgos de la angiografía por TC, el tiempo transcurrido desde el diagnóstico hasta la cirugía, la técnica endovascular y los materiales utilizados, la extensión del tejido embolizado y los resultados.

En el estudio fueron incluidos 22 pacientes con una edad media de 63 años. La etiología de las lesiones incluyó: biopsia renal, sangrado por tumor renal maligno, trauma, angiomiolipoma, sangrado espontáneo y complicaciones quirúrgicas.

La técnica de terapia endovascular fue la embolización en todos los casos. Se utilizaron los siguientes materiales: esferas, bobinas, esferas + bobinas y esferas + tapón.

En 17 casos se realizó embolización selectiva y en 5 casos embolización de todo el riñón. Se registraron tasas de éxito clínico y técnico del 100%. La tasa de mortalidad a 30 días fue 9.1%.

Discusión

En esta discusión, nos centraremos principalmente en tres aspectos diferentes. En primer lugar, en las causas del sangrado renal, en segundo lugar, la justificación de la utilización de la angio-TAC y, por último, el tratamiento y el material empleado.

De todos modos, antes de avanzar en nuestra exposición queremos indicar que el presente estudio tiene una serie de limitaciones. La principal es debida a que se trata de un estudio de carácter retrospectivo, por lo que genera un sesgo vinculado a la recogida y análisis temporal de los datos.

En algunos casos la hemorragia renal provoca una situación clínica que implica un riesgo de muerte o de secuela funcional grave, por lo que se requiere de una intervención urgente.

Debido al estado de elevada morbimortalidad en que se encuentran estos pacientes, creemos que en la mayoría de los casos el tratamiento mínimamente invasivo es la mejor opción para el control de la hemorragia.

Asimismo, la embolización selectiva, en la mayoría de los casos, es posible, lo que permite preservar gran parte del parénquima renal. En consecuencia, consideramos que debemos continuar utilizando las técnicas endovasculares para tratar aquellos pacientes que presentan sangrado renal.

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