EPIDIDIMITIS
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¿Para qué sirve el medicamento Ciprobiotic?
Útil en el tratamiento de las siguientes infecciones: vías respiratorias, oído medio y de los senos paranasales, riñones y/o vías urinarias, bacterianas del tracto gastrointestinal y de las vías biliares, piel y tejidos blandos y septicemia.
¿Cómo se toma el medicamento Ciprobiotic?
250,500 y 750 mg cada 12 horas, dependiendo de la indicación y de la gravedad del padecimiento.
¿Qué contiene el medicamento Ciprobiotic?
Ciprofloxacino.
Cada tableta contiene:
Clorhidrato de ciprofloxacino monohidratado
equivalente a ........ 250 mg
de ciprofloxacino
Excipiente, cbp .......... 1 tableta
- Se emplea en infecciones de las vías respiratorias, tales como: Bronquitis aguda, reagudización crónica, fibrosis quística, bronquiectasia y septicemia.
- En infecciones de tracto genitourinario, como: Uretritis complicadas y no complicadas, cistitis, pielonefritis, prostatitis, epididimitis y gonorrea.
- En infecciones gastrointestinales, tales como: Fiebre tifoidea, diarrea infecciosa, infección de vías biliares y peritonitis.
- En infecciones osteoarticulares: Artritis infecciosa, osteomielitis, etc.
- En infecciones de la piel y tejidos blandos: Ulceras, quemaduras y heridas infectadas, abscesos, etc.
La acción del ciprofloxacino abarca el siguiente espectro bacteriano:
- Organismos grampositivos: Staphylococcus aureus, S. pyogenes y S. pneumoniae.
- Moderadamente sensibles: S. faecalis, Mycobacterium tuberculosis y Chlamydia trachomatis.
- Organismos gramnegativos: Escherichia coli, Klebsiellas, K. pneumoniae y K. oxitoca, Enterobacter spp., Citrobacter spp., Edwardsiella spp., Salmonella spp., Shigella spp., Proteus mirabilis y P. vulgaris, Providencia stuartii y P. rettgeri, Morganella morganii, Serratia spp., Yersinia enterocolitica, Pseudomonas aeruginosa, Acinetobacter spp., Haemophilus influenzae y H. ducreyi, Neisseria gonorrhoeae y N. meningitidis, Branhamella catarrhalis, Campylobacter spp., Aeromonas spp., Vibrio spp., Brucella melitensis, Pasteurella multocida y P. legionella.
- Sensibilidad sujeta a comprobación antes del tratamiento: Serratia marcescens, Streptococcus faecalis, S. faecium y S. pneumonia, Mycoplasma hominis, Mycobacterium spp. y anaerobios.
Nota: Pseudomona aeruginosa puede desarrollar resistencia durante el tratamiento. - Son generalmente resistentes: Ureplasmas urealyticum, Clostridium difficile y Nocardia asteroides.
No hay datos sobre la sensibilidad del Treponema pallidum.
De igual forma se emplea en infecciones:
- Del oído medio (otitis media) de los senos paranasales (sinusitis), especialmente cuando están causadas por gérmenes gramnegativos incluidos Pseudomonas spp., o por Staphylococcus spp.
- De los ojos.
- De los riñones y/o de las vías urinarias.
En casos de hipersensibilidad al ciprofloxacino o a otros quimioterápicos de tipo quinolínico, el ciprofloxacino no debe ser administrado. El ciprofloxacino no debe ser administrado a niños jóvenes en edad de crecimiento así como a mujeres embarazadas y en periodos de lactancia, ya que no existe experiencia sobre la seguridad en administración en estos grupos. No se puede descartar por resultados de la experimentación animal, lesiones de los cartílagos articulares en organismos no adultos. La experimentación animal no ha dado ningún indicio de acciones teratógenas (malformaciones).
El ciprofloxacino está contraindicado en pacientes hipersensibles a las quinolas, en el embarazo, lactancia, en niños y adolescentes excepto cuando los beneficios superan claramente los riesgos posibles.
Muy raras veces colitis pseudomembranosa, convulsiones, hipertensión endocraneana, reacciones psicóticas y otras del SNC, reacciones anafilácticas, incluido shock, síndrome de Stevens-Johnson, nefritis intersticial, trastornos hepáticos graves inclusive necrosis hepática, fotosensibilidad; disturbios de la función renal inclusive fallo renal pasajero, pérdida temporal del sentido del oído, diplopía, xantopcia, disguesia, disminución de la aptitud para conducir y manejar máquinas. La administración parenteral puede ocasionar flebitis, taquicardia y muy raramente rubefacción, migraña y debilidad, artralgias, mialgias, discrasias sanguíneas.
Envase con 8 y 12 tabletas de 250 mg.
Oral.
El ciprofloxacino se administra por vía oral de 250, 500 y 750 mg cada 12 horas, dependiendo de la indicación y la gravedad del padecimiento. En infecciones de vías urinarias o de las vías respiratorias (bronquitis) se pueden administrar dosis de 250 a 500 mg cada 12 horas. En infecciones especialmente graves (por ejemplo: en brotes de infección recidivante en pacientes con mucoviscidosis, neumonías, infecciones de la cavidad abdominal, huesos y articulaciones), causadas por Pseudomonas spp., o Staphylococcus spp., y en neumonías agudas con Streptococcus pneumoniae, puede aumentarse la dosis diaria a 2 x 750 mg (oral), en casos de que no sea tratado por vía parenteral.
Igual que el manejo de cualquier antibiótico es recomendable que la administración de ciprofloxacino se prolongue por lo menos 3 días después de que haya desaparecido la fiebre. La dosis debe reducirse si el aclaramiento de creatinina está por debajo de 20 ml/min. En infecciones graves, crónicas y osteomielitis, puede prolongarse la administración sin ningún peligro para el paciente. En la gonorrea no complicada es suficiente una dosis única de 250 mg para la erradicación de la enfermedad. Cuando una infección urinaria está causada por Chlamydia trachomatis, la dosis deberá ser aumentada a 750 mg cada 12 horas.
Los pacientes de edad avanzada deben recibir una dosis lo más baja posible, según la gravedad de la enfermedad y el aclaramiento de creatina.
En caso de que el paciente por la gravedad de su enfermedad o por otras razones no estuviera en condiciones de ingerir los comprimidos, se recomienda empezar el tratamiento con la forma intravenosa de ciprofloxacino.
Duración del tratamiento: La duración del tratamiento se rige según la gravedad de la enfermedad, así como la evolución clínica y bacteriológica. En principio el tratamiento debe continuarse por lo menos durante 3 días después de la desaparición de la fiebre o de los síntomas clínicos.
Duración promedio del tratamiento: De 1 día en gonorrea aguda hasta 7 días en infecciones renales, vías urinarias y cavidad abdominal, durante todo el tiempo de la fase neutropénica en pacientes con defensas disminuidas, máximo de 2 meses en la osteomielitis y de 7 a 14 días en todas las demás infecciones. En infecciones estreptocócicas y por clamidia el tiempo de tratamiento debe ser por lo menos de 10 días debido al peligro de complicaciones tardías.
Dosificación en insuficiencia renal: Cuando la depuración de creatina sea menor de 20 ml/min, o cuando la creatina sérica sea mayor de 3 mg/100, se administrará la mitad de la dosis normal cada 12 horas o la dosis normal cada 24 horas.
La dosificación de ciprofloxacino por vía oral se determina por la gravedad y tipo de infección, sensibilidad de microorganismo, edad, peso y función renal del paciente, en general se recomienda utilizar de 500 a 1,500 mg/día de ciprofloxacino, si es estrictamente necesario en niños y adolescentes la dosis deberá ser de 7.5 a 15 mg/kg/día.
Todas las dosis divididas en dos tomas al día, la duración del tratamiento es generalmente de 7 a 14 días y debe mantenerse 2 días después de que los síntomas hayan desaparecido.